Siguiendo con Bread & Butter Barcelona (BBB) me permito hacer un “copy-paste” del artículo la La Vanguardia de Martina Klein titulado “La feria de las Maravillas”. Creo que es interesante tenerlo en [ ( Alta )2 Costura ] por diversos motivos como (i) leer la visión de una modelo como Martina, (ii) que los que no tengan acceso o no sean asiduos a La Vanguardia tengan la oportunidad de leerlo y porque, en definitiva, (iii) esta semana es LA Notícia sobre moda.

La feria de las maravillas

El Bread & Butter es un circo futurista casi perfecto y tremendamente estimulante

Desperté de la siesta con el sol de invierno calentándome las mejillas. Mi cuerpo reposaba sobre una superficie que le dejaba amoldarse cómodamente. En mi boca había recuerdos de un cóctel exótico y mi nariz se desperezó del letargo detectando vagamente olor a domingo al aire libre, que poco a poco fue tomando forma de salchichas a la parrilla. Me quedé inmóvil aún con los ojos cerrados para disfrutar del calor de ese sol sobre cada centímetro de mi ropa y ésta calentando mi piel. La agonía de los sonidos de mi sueño se fundieron con los de la vida real, y unos compases de rock´n´roll invadieron mi cabeza provenientes de otro mundo. Recibí en ese lapso tanta información sensorial distinta, que no supe a qué realidad hacerle caso. Dudé en abrir los ojos, porque todo lo que percibía hacía que la vigilia superase las sensaciones del sueño, y eso me gustó. Pero la curiosidad me pudo y quise más. Subí los párpados despacio y me encontré con un equipo de hockey sobre hielo cruzando mi campo de visión de un lado a otro, y al incorporarme, tres conejitas de playboy pasaron delante de mí a la vez que cuatro tíos flexibles como las pelotitas de goma que rebotaban sobre el suelo, el techo y las paredes del recinto azul en el que me encontraba. Entonces recordé que me había venido al Bread & Butter y no sé decir si sentí alivio o no al caer en que no me había vuelto loca, sino que esta feria supera con creces la ficción.

El Bread & Butter es sin lugar a dudas, la feria de la gente joven, y a día de hoy, el evento de moda más importante de Europa por su repercusión mediática, y su número de visitantes y expositores. Unas 90.000 personas han pasado estos días por la Fira de Barcelona con el propósito de descubrir las tendencias en la moda más urbana. Los casi mil expositores convierten la experiencia de recorrerla en una bacanal para los sentidos, donde se pelean por llamar la atención con atracciones de lo más variadas y sorprendentes. Nació en Berlín, pero Barcelona le abrió las puertas en el 2005, y estuvo a caballo entre las dos ciudades, para quedarse a vivir definitivamente aquí, convirtiéndonos en el epicentro del mundo fashion (y por un momento nos olvidamos de la eterna batallita con Madrid por la hegemonía de la moda española). La creatividad flota en el aire y se retroalimenta: los visitantes vienen a ver las propuestas que presentan las diferentes marcas, y marcan con sus looks, que son para no dar crédito, lo que será tendencia en un futuro próximo. Un encuentro obligado para los benjamines consumidores y hacedores de moda de todo el mundo, y gracias al saber hacer de los alemanes, es un circo futurista casi perfecto y tremendamente estimulante. Y allí estaba yo, en el stand de Wrangler. Y al compás del Satisfaction de los Rolling me pedí otro mojito y me sumergí, esta vez despierta y como Alicia, en el país de las maravillas. Martina Klein

Desde [ ( Alta )2 Costura ] deseamos a Martina que recupere la normalidad y la ilusión después de su reciente separación.

Angelotti